Socialismo: Ideología cínica

El Expreso de Guayaquil

El socialismo en todas sus formas es modelo fracasado. Siempre lo fue por irse contra la esencia del ser humano. Una de sus más grandes debilidades es el empobrecimiento de muchos y enriquecimiento de pocos, características mal atribuidas al capitalismo.

Los pocos países que han tenido relativo éxito aplicando medidas socialistas, son aquellos que usaron principios capitalistas en la economía. Europa, con su modelo socialista de Estado Benefactor se encuentra en severa crisis por mal enseñar al ciudadano a no asumir responsabilidades y vivir a expensas del Estado.

El socialismo es una ideología moralmente quebrada cuando afirma que el sistema ayuda a la sociedad a tener mejores días. Las utopías no existen en el mundo real. Tuve la oportunidad de visitar Alemania Oriental cuando se encontraba bajo el control de los soviéticos. Recuerdo haber visto carros muy lujosos y cuando pregunté al taxista a quiénes pertenecían, me contestó que a los gobernantes. Él lamentaba los bajos ingresos del pueblo.

Los socialistas, salvo excepciones, son cínicos, no practican lo que predican. Hablan de un mundo igualitario logrado reduciendo la riqueza para que todos tengan por igual, privadamente viven como ricos.

Hace pocos días dos funcionarios del Estado pagaron más de 100 dólares por una cena en un exclusivo restaurante.

En casi medio siglo he conocido a numerosos socialistas, pero ninguno ha merecido mi respeto por no ser auténticos, la excepción fue Elías Muñoz Vicuña, quien vivió sin lujos, sus ahorros los invertía en una biblioteca. Tuve la oportunidad de visitar su casa frecuentemente por tener una biblioteca de temas nacionales con más de 10.000 libros. Era entre las más grandes que había conocido. Su casa carecía de excesos. Fue honesto abogado de trabajadores. En una ocasión me llamó para comentarme que se había enterado que un familiar tendría una huelga y conociendo que era un buen patrono quería reunirse con él para ayudar a ambas partes, lo hicieron, se superó el impasse y no cobró honorarios. Él debería ser modelo para quienes practican el socialismo.