Colombia: ¿Será que EE.UU. también es de la “mano negra”?

El Colombiano, Medellín

“Ya lo sé, que no hay quien quiera a un mensajero que trae malas noticias”, “¿para qué ablandar una noticia, si luego he de quedar como embustero? La verdad es siempre el camino más recto”. Apartes de Antígona de Sófocles.

Aunque sin confirmación contundente, a excepción de menciones de Sófocles y Shakespeare, se dice que en la antigüedad reyes autoritarios y crueles resolvían el problema de las “malas noticias” ejecutando a los mensajeros que trajesen consigo incómodos o desagradables informes.

Hace unas semanas, el Gobierno Nacional decidió lanzar una demencial aseveración, fruto de una rebuscada interpretación de una encuesta de bolsillo, según la cual los causantes de la “mala imagen” del país eran las Farc y las opiniones del expresidente Uribe, que según los áulicos del Palacio de Nariño, es el jefe de un sector de la enigmática, por no saber todavía qué diablos es, “mano negra”, en la que caen todos los que no están de acuerdo con el Gobierno, así tengan la razón.

Tan surrealista reacción no sería una vergüenza, si viniese de alguien que no tiene los antecedentes e incluso buenas intenciones del actual Presidente. Errar es humano y hasta entendible, pero apelar a estos mecanismos demuestra una faceta vil de alguien que queremos pensar que no es así, y que solo por su ego herido reacciona vergonzosamente y sin la grandeza que da la humildad.

Creer que no decir nada, satanizar a quien diga la verdad y ocultar la realidad es la forma de cambiar esta última, es la lógica de la gallina que cruzando la calle delante de un carro, voltea la cara para que la “amenaza desaparezca”. ¿Será que creen que si el expresidente Uribe se calla, entonces las Farc y sus actos van a desaparecer? Yo he visto muchas tonterías en mi vida, incluyendo las mías que no son pocas, y me faltarán muchas más por ver, pero me niego a creer que eso sea cierto. Si eso funciona, ¡corran a patentarlo porque están perdiendo millones de dólares en regalías!

Pero insistir en esta fórmula va a meter al Gobierno en más problemas que los que quería evitar. La semana anterior el Departamento de Estado de EE. UU. señaló en su informe anual sobre el terrorismo que el Hemisferio Occidental experimentó un aumento del 40% de ataques terroristas, pero que ese aumento es atribuible principalmente al aumento de la violencia provocada por las Farc y en menor medida por el Eln.

Expresidente Uribe, le tengo “malas noticias”, aunque no me asusta decirlo porque usted no mata a los mensajeros de las malas nuevas: “le quitaron el segundo puesto en el ranquin de “malditos de este país”.

El Departamento de Estado, luego de semejante anuncio que le da la vuelta al mundo más que sus trinos, es ahora la segunda amenaza para Colombia y si aplicamos la ilógica lógica del Gobierno, es uno de los principales causantes de la “mala imagen del país”. ¿Cuándo iba a pensar el Departamento de Estado que iba a quedar igualado y en la misma categoría de los mayores criminales de Colombia?.