Venezuela: Control no institucional

¿En el país que no existe? ¿Qué entendemos por control público? ¿Es el control que supuestamente ejerce el pueblo, el ciudadano común, el público, todo aquel ciudadano que esta fuera del sector gobierno, del sector gubernamental, sobre el gobierno? ¿Entendiendo por gobierno todo el espectro político administrativo: poder público, de arriba hacia abajo y horizontal? ¿Se realiza control público sobre el gobierno? ¿Vale la pena en estos momentos, luego de la declaratoria gubernamental de ser y practicar el comunismo marxista, decir algo mas sobre el tema?…Nunca es tarde si todavía tiene validez, para la mayoría de los ciudadanos, aquello de: “en el principio existía el verbo, el verbo estaba con dios y el verbo era dios”. Jn 1,1.

Para ninguno de los habitantes de este país es un secreto lo difícil, por no decir imposible, que se le hace a un solo ciudadano ejercer y/o exigir algún tipo de control sobre el gobierno, en cualquiera de sus entes, por más que este escrito en la constitución y leyes. Luego de la declaratoria marxista, tarea imposible.

Aquí, por las innumerables noticias cotidianas, el ciudadano no valía nada para el gobierno. No existe. Ahí el caso de los partos a las puertas de centros de salud, en la calle. Ahí las innumerables quejas de los ciudadanos a través de los medios de comunicación. Allí, por reciente, el caso del ciudadano Brito y la Juez. Y ahí quedan. Ahora, luego de la declaratoria, vale menos que nada.

Por esa razón aquí en este momento nos referimos a otros actores que han venido a sustituir, en la práctica y por ahora, al ciudadano, al pueblo, en esa función de tratar de controlar al gobierno. Son los grupos y partidos políticos, las llamadas organizaciones no gubernamentales y los medios de comunicación.

Desde la época en la cual El Libertador Simon Bolívar lo reconocía, hasta hoy, la opinión publica y el papel de los medios de comunicación social, en materia de control de la actividad pública, era cada día más relevante.

El ejercicio de la democracia plural es como dice el refrán popular "lo que cree el pueblo, lo que piensa el pueblo, lo que siente el pueblo", que es su voluntad soberana. La democracia popular, plural, tiene su apoyo en la opinión pública, en la opinión del pueblo, del ciudadano. La dictadura tiene su apoyo en las armas, no en el pueblo, no en el ciudadano.

Los medios de comunicación con su actual tecnología, en determinadas circunstancias, llegan a donde el gobierno, por alguna razón, no llega. Cuando el poder publico, en alguna de sus ramas, sobre todo la ejecutiva y legislativa, no cumple con sus funciones y/o se desvía del mandato constitucional y legal, son los medios de comunicación quienes se han encargado, últimamente, de presionar al gobierno recordándole además a la sociedad civil organizada cuál es su papel y alertan a la población sobre las circunstancias de la función pública. Eso en una democracia plural, no en una dictadura.

Por otra parte, en regímenes donde no existe oposición con posibilidades de llegar al poder o donde la oposición está muy dispersa y minimizada, son los medios de comunicación quienes se han encargado, por presión popular, del ciudadano, de encarnar la oposición o de aglutinar las distintas corrientes opositoras presentes pero diluidas en la sociedad; sin que por ello no se le dé cabida a la información sobre la gestión de gobierno y a la participación de sus voceros. Estas son formas mediante las cuales se evidencia el nuevo rol de los medios como entes de control en una sociedad democrática y plural.

Los medios de comunicación se reubicaron, se ocuparon de eso, de ser medios, vías, canales de enlace entre los entes gubernamentales y el colectivo.

Pero cuando esa función se extralimita, entonces presenciamos y asistimos a una deformación cuestionable del control no institucional como es la supuesta "democracia mediática", en donde se plantea, en muchos casos el desplazamiento del debate político del parlamento hacia los medios (prensa, radio y televisión, etc.), y cómo la influencia de los medios, más allá de la información y la denuncia, llegan, en algunos casos y/o momentos, a marcar la agenda política de los gobiernos.

El hecho de que la acción de gobierno se lleve y discuta libremente en los medios de comunicación ya es, en si misma, un mecanismo de control, por supuesto, su grado de efectividad dependerá en gran medida del grado ético de cada sociedad.

Es bueno tener presentes que gracias a algunos medios de comunicación, con intención y/o no, que difunden masivamente cualquier imagen relacionada con el gobernante, este mantiene altos niveles de difusión, incluyendo, blasfemias y groserías y malos tratos y ejecutorias.

Recordemos brevemente que el actual poder publico, en el país que no existe, según la constitución de 1999, permitía en el texto, en el papel, un tipo de control institucional, ejercido por órganos del estado, y otro tipo, el no institucional, siempre por organizaciones y/o grupos no oficiales, de ciudadanos, de pueblo. ¿Cuáles son y donde están? ¿Cuál ha sido su labor en estos últimos 10 años?

Esquemáticamente lo representaremos así:

A. Control Institucional

1. Control Político

2. Control Jurídico o Jurisdiccional

3 Control Administrativo

4. Control Social

B. Control no Institucional

1. Medios de Comunicación y Opinión Pública

2. Organizaciones no gubernamentales (ONG) Grupos de Representación de Intereses.

Y en cuanto a las organizaciones no gubernamentales como las ONG, podemos repetir cuantos otros han manifestado con anterioridad: que surgen después de la Segunda Guerra Mundial, con la idea de reforzar la estructura de la sociedad, a través de la participación de sus miembros. Tal vez su mayor despliegue lo alcanzaron a mediados de la década de los años 80. Se puede argumentar a su favor con relación a los órganos públicos, lo siguiente:

• Que llegan fácilmente a los sectores de su interés

• Son menos costosas

• Se adaptan fácilmente a su medio

• Son menos burocráticas

• Son altruistas

Según fuentes del Parlamento Europeo, actualmente existen aproximadamente 25.000 ONG en el mundo, cuidado si algo más. En la función de control, actúan como grupos de presión a favor de sus objetivos. Se consideran un factor de democratización, cuyas acciones no van necesariamente opuestas al gobierno.

Atrae nuestra atención las ONG de Desarrollo, llamadas ONG de 4a generación. Estas plantean influir en los gobiernos e instancias responsables de las políticas de desarrollo a fin de conseguir el diseño de políticas coherentes con sus objetivos y una ejecución coordinada de las mismas, mediante asociaciones estratégicas con los poderes públicos, para alcanzar un desarrollo en términos amplios que abarca el ser humano en múltiples dimensiones (educación, salud, políticas de género, necesidades particulares, etc.)

¿Tenemos resultados prácticos en el país que no existe? ¿Se pueden enumerar y exhibir logros de las Ong´s venezolanas y/o actuantes en Venezuela?

Nota: luego de los recientes discursos en la Habana y Copenhague y de la aparición en las nuevas leyes de la palabra socialismo, no contemplada en la CN, quedan por sopesar algunas inferencias: una, la total dependencia ideológica, administrativa y política de la Habana; dos, el comportamiento de marioneta total del máximo burócrata y oligarca nacional a manos de la Habana; tres, la necesidad de resistir, oponerse y rebelarse a tamaña ignominia contra la nación venezolana.

Afortunadamente tenemos la posibilidad, incluso constitucional (Art. 350), de rechazar legislación que este en contra de la CN. ¿Será posible en algún momento cercano? ¿La soberanía esta en el pueblo aun?

“Cuando el gobierno teme a las personas, eso es libertad. Cuando las personas temen al gobierno, eso es tiranía”.

“Aquellos que esperan cosechar los beneficios de la libertad, deben, como hombres, sobrellevar la fatiga de defenderla”.

Thomas Paine, 1737-1809.