Latinos, lejos del gabinete
Bill Richardson, gobernador del estado de Nuevo México, es, por ahora, el único hispano que podría tener un puesto de alto perfil en el gobierno que presidirá Barack Obama a partir del 20 de enero.
Richardson suena con insistencia como el candidato a ocupar el puesto de Secretario de Comercio. El camino del gobernador hacia el gabinete pareció despejarse esta semana, cuando otra de las candidatas al cargo, la empresaria Penny Pritzker, descartó la posibilidad de asumirlo.
Según los blogs políticos de Washington parece poco probable que el gobernador decline el cargo, pero la verdad es que ese no era el puesto que quería ni para el que lo habían postulado decenas de organizaciones hispanas.
Líderes y grupos latinos le habían mandado una carta al presidente electo sugiriéndole el nombre de Richardson para la Secretaría de Estado, es decir, el manejo de las relaciones exteriores de Estados Unidos.
Según estos militantes, que le recordaron a Obama sus esfuerzos por movilizar el voto latino en algunos estados clave, "nadie está mejor preparado" para encabezar la diplomacia estadounidense.
Embajador? No, gracias
Ya se da por hecho que la Secretaría de Estado va a ser para Hillary Clinton. La jefatura del Departamento de Seguridad Interna (a cargo de temas tan delicados como los indocumentados), era otro de los cargos para los que se preveía un hispano. Pero todo apunta a que será para Janet Napolitano, la gobernadora de Arizona.
Pero aparte de Richardson, no se menciona ningún otro candidato o candidata hispana para ocupar un lugar en los puestos de alto perfil del nuevo gobierno.
Efraín Escobedo de la Asociación Nacional de Funcionarios Latinos Electos y Designados, le dijo hace poco a BBC Mundo, que las expectativas que generó Obama en el electorado hispano "debe enfocarse en los nombramientos del nuevo gabinete".
Cuota hispana
El comentarista político Walter Coleman asegura que "hay que considerar que, que se sepa, no se ha dicho que Obama esté considerando a otros hispanos para puestos en el gabinete". Con lo cual parece que Richardson será la cuota latina en los altos niveles del nuevo gobierno.
Los movimientos que trae el nuevo gobierno, sin embargo, puede generar que algunos líderes latinos tengan acceso a nuevas posiciones en Washington.
Por ejemplo, la recientemente nombrada jefa de la bancada hispana en la Cámara Baja del Congreso, Nidia Velásquez, podría pasar a ocupar el puesto que deje vacante Hillary Clinton en el Senado si finalmente acepta el puesto de Secretaria de Estado.
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