¿Y dónde queda el norte?
En 1996 apareció en el cielo un cometa muy brillante. Tenía una cola larga, de color verde, que atravesaba la mitad del cielo. Con esa cola era fácil observarlo a simple vista. Era el cometa Hyakutake, nombrado así en honor a su descubridor, el japonés Yuji Hyakutake.
Un día de marzo, cuando el cometa estaba en lo mejor, recibí la llamada de un señor que quería localizarlo, y la conversación fue más o menos así: ¿podría decirme dónde localizar el cometa? “Claro”, le dije, “lo puede localizar en la constelación de la Osa Menor”. ¿Y dónde está la Osa Menor?, preguntó, “se encuentra en el Norte”, dije, ¿Y dónde queda el Norte?, preguntó… Me quedé callado unos segundos pues no esperaba esa pregunta. Había asumido que todos sabíamos dónde queda el Norte, pero no es así. La mayor parte de la gente hoy en día no sabe dónde queda el Norte (ni les interesa) porque no lo necesitan para desempeñar sus actividades. Sin embargo, es importante saber orientarse y ubicar los 4 puntos cardinales que son: Norte, Sur, Este y Oeste. La palabra cardinal viene del latín cardo, que significa calle. Los antiguos romanos la usaban para identificar la calle trazada de Norte a Sur que pasaba por el centro de la ciudad, como sería hoy la sexta avenida de la capital. “Le hablo de San Benito”, continuó diciendo la voz. Indicar dónde queda el norte a alguien de la capital es fácil. Se pueden usar referencias como el Hipódromo del Norte o el Mapa en Relieve, pero ¿cómo explicárselo a alguien que está en otra ciudad?
Sólo quedaba una cosa, usar el punto de referencia universal: el sol. “Para ubicar el norte”, le dije, “primero mire hacia donde sale el sol en su vecindad. Una vez está viendo hacia esa dirección, el Norte queda a mano izquierda”. El sol sale por el Este, y si uno está viendo hacia el Este, el Norte queda a la izquierda. En cambio, si uno está viendo hacia el Oeste, el Norte queda a mano derecha. Al Este también se le llama Oriente porque sirve para orientarse, mientras que al Oeste se le llama Occidente o Poniente porque es el lugar donde se pone el sol. El Sur queda opuesto al Norte y así completamos los 4 puntos cardinales. En la noche hay constelaciones que sirven de referencia, por ejemplo, la Osa Mayor. Está formada por 7 estrellas brillantes y señala el Norte. Aunque las culturas antiguas la miraban como una osa, la reconocemos más rápido si imaginamos un barrilete.
La Estrella Polar es otra señal importante, porque no cambia su posición en toda la noche ya que está alineada con el eje de rotación de la Tierra. Por siglos sirvió de guía a los navegantes, pero hoy el GPS la ha sustituido. Está en la punta de la cola de la Osa Menor. Se dice que las dos Osas son guardianas de la Estrella Polar y por eso permanecen en el Norte. Es importante no perder el norte y saber orientarse por el sol y las estrellas, pues uno nunca sabe cuándo le puedan servir.
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