Chávez amenaza a automotrices extranjeras

The Wall Street Journal

El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, acosado por una recesión que está afectando su popularidad, ha apuntado su mira a las automotrices extranjeras, amenazándolas con nacionalizarlas y prometiendo aumentar la intervención en sus negocios en el país.

El líder populista ha amenazado con expropiar una planta de ensamblaje de Toyota Motor Corp. si la automotriz japonesa no fabrica más vehículos para áreas rurales y no transfiere nuevas tecnologías y métodos manufactureros a su unidad local. Chávez señaló que otras automotrices también eran culpables de no transferir suficiente tecnología, incluidas la estadounidense General Motors Co. y la italiana Fiat SpA, que controla a Chrysler Group LLC.

El mandatario le ordenó a su ministro de Comercio, Eduardo Samán, que inspeccionara la planta de Toyota. Chávez dijo que si la inspección muestra que la automotriz no está produciendo lo que piensa que deberían y no está transfiriendo tecnología, el gobierno podría considerar tomar el control de su planta y hacer que una empresa china la opere.

"Le decimos que se vayan, esta casa es nuestra, y ese mismo galpón y fábricas las expropiamos, les pagamos lo que valgan y llamamos rápidamente a los chinos y se vendrían volando", dijo Chávez en un discurso televisado.

Chávez ha nacionalizado decenas de empresas extranjeras y, a veces, sectores enteros de la economía, incluyendo empresas energéticas, cementeras, cafeteras y de servicios petroleros.

Un portavoz de Toyota en Tokio indicó que la compañía estaba verificando con la embajada japonesa en Venezuela, la embajada venezolana en Japón y el Ministerio de Relaciones Exteriores del país asiático. La empresa aún no ha decidido cómo o si tomará cartas en el asunto, dijo el vocero.

Representantes de GM y Fiat no pudieron ser contactados.

Los ataques verbales de Chávez contra la automotriz japonesa estarían motivados por cuestiones políticas y serían el resultado del peculiar mercado automotor de Venezuela, afirmaron analistas. Muchos consumidores venezolanos están enojados por una escasez de nuevos autos en el mercado, en parte debido a la poco ortodoxa política económica de Chávez.

Aunque los comentarios de Chávez sugieren que su gobierno intervendrá más en el mercado local de autos en un intento por aumentar el suministro de autos en venta, algunos analistas minimizaron las amenazas del presidente de recurrir a la nacionalización, una medida que probablemente no solucionará los problemas subyacentes.

Cualquier intento de nacionalización tendría poco impacto en los resultados de Toyota. Las operaciones venezolanas de Toyota son las menores de los cuatro países latinoamericanos donde produce autos. Además, el mercado venezolano ha caído de forma pronunciada el año pasado, mientras que otros mercados en la región, como Argentina, Brasil y México, se han mantenido constantes o han crecido pese a la recesión global.

Toyota fabricó 13.000 vehículos en Venezuela el año pasado y vendió unos 30.000, lo que representó una cuota de mercado de 11%. A nivel mundial, Toyota vendió casi nueve millones de vehículos en 2008.