La disputa entre Argentina y EE.UU. por un cargamento incautado se intensifica

Argentina acusa a EE.UU. de intentar introducir a escondidas armas, equipos de comunicaciones y vigilancia y narcóticos en el avión militar que llegó la semana pasada para un curso sobre el manejo de rehenes impartido por EE.UU. a la policía argentina. EE.UU. dice que las acusaciones son ridículas y que sólo trajeron el equipo para que fuera usado en las sesiones de capacitación.

Los funcionarios argentinos dicen que el material confiscado no estaba incluido en los documentos presentados al gobierno para la embajada estadounidense antes de la llegada del avión, acusación que niegan con firmeza las autoridades de EE.UU.

"Quiero enfatizar la necesidad de que nuestro equipo sea devuelto de inmediato por el gobierno de Argentina sin tener en cuenta lo que motivó este comportamiento inexplicable", dijo el martes Paul Stockton, el secretario adjunto de Defensa para América Latina.

Las autoridades argentinas, sin embargo, respondieron que EE.UU. necesitaba aprender que Argentina tiene sus propias leyes que deben respetarse.

"Sólo imagine qué habría pasado si un avión argentino hubiera llevado ese mismo tipo de material a EE.UU. (Los argentinos) estaríamos todos en Guantánamo en batas naranjas", comentó Aníbal Fernández, el jefe de Gabinete de la presidenta Cristina Fernández, en una entrevista con la emisora local de radio, Radio La Red.

El ejercicio de entrenamiento había sido concertado a petición del gobierno argentino y era la continuación de uno anterior de septiembre de 2009, de acuerdo a Frank Mora, el subsecretario adjunto de Defensa para Asuntos del Hemisferio Occidental.

"Esto fue todo coordinado en las esferas más altas del gobierno argentino", explicó Mora en una entrevista, que añadió "así es que nos tomó de sorpresa la manera en la que el gobierno reaccionó a este incidente".

Cuando el avión aterrizó el jueves fue recibido en el aeropuerto por altos funcionarios del gobierno argentino, incluido el Ministro de Relaciones Exteriores, Héctor Timerman, que supervisó la incautación del cargamento ante la mirada perpleja de los estadounidenses.

Algunos funcionarios argentinos han dicho que el equipo de comunicaciones tenía la intención de espiar las conversaciones telefónicas de las autoridades, pero Mora afirma que se trata de equipo estándar de comunicaciones para el ejercicio.

Los funcionarios de EE.UU. dijeron que los narcóticos incautados por el gobierno argentino son una pequeña cantidad de morfina de un botiquín de primeros auxilios, que se llevó como medida de precaución, dado que se trataba de ejercicios con fuego real.

Las autoridades argentinas también incautaron un fusil M4 y varios "alimentos preparados", las raciones militares típicas, explicó Mora.