Obama: El candidato de los 1000 millones de dólares

WASHINGTON.- El presidente Barack Obama ya no es el candidato "outsider" que en 2008 nutrió su candidatura para la Casa Blanca con una lluvia de pequeñas donaciones de votantes jóvenes inspirados por su mensaje de cambio y esperanza.

Como presidente en ejercicio, tiene mucha más autoridad y acceso a los medios, y se espera que su campaña para la reelección en 2012 recaude 1000 millones de dólares, una cifra sin precedente en la política norteamericana.

"En 2008, era prácticamente un candidato insurgente, alguien que había salido de ninguna parte y con una historia de vida absolutamente diferente. La campaña de Obama fue casi una cruzada, más que una campaña tradicional de un candidato a la presidencia", dijo Christopher Arterton, un profesor de administración política de la Universidad George Washington que también ha sido consultor de los demócratas.

Con una ventaja inicial en las encuestas frente a sus potenciales rivales republicanos, el presidente anunció ayer su intención de buscar la reelección por medio de mails y mensajes de texto y con un video en el portal www.barackobama.com. Se espera que gran parte de sus fondos de financiación procedan de la clase de donaciones de grandes sumas de dinero que él mismo criticó en el pasado.

Esta vez, el ex senador de Illinois ya no es la fresca cara política que quiere convertirse en el primer presidente negro de Estados Unidos. Su campaña de 2012 será una máquina mucho más grande y sofisticada, que probablemente empequeñezca la de su eventual oponente republicano.

Sus asesores señalan el enorme número de donantes individuales que contribuyeron a la campaña de Obama. una cifra récord de cuatro millones de personas. Pero solamente el 25% del dinero provino de los pequeños donantes que contribuyeron con 200 dólares o menos, según revela el Instituto de Financiación de Campañas de Washington, una organización no partidaria.

Inevitablemente, Obama perderá muchos de los donantes individuales que lo apoyaron hace cuatro años, dijo Anthony Corrado, profesor de la Universidad Colby y experto en recaudación de fondos de campaña.

"No veremos nada de eso esta vez, ni ese nivel de entusiasmo por la candidatura de Obama que vimos la última vez, generado entre personas que no son donantes tradicionales ni tampoco votantes tradicionales de las primarias demócratas", agregó.

Obama recaudó un récord de 750 millones de dólares en el camino hacia las elecciones de 2008. Se espera que su campaña de 2012 recaude un total de 1000 millones de dólares o más, incluso sin un oponente importante en las primarias demócratas o si aparece un fuerte rival republicano.

"Es una cifra perfectamente plausible, ya que recaudó 750 millones de dólares la última vez. Como presidente en ejercicio, es totalmente posible imaginar que puede recaudar 1000 millones de dólares", dijo el director ejecutivo del Instituto de Financiación de Campañas, Michael Malbin.

Jim Messina, un ex vicejefe de gabinete de la Casa Blanca que se ocupará de la campaña de Obama, les dijo a sus partidarios más importantes que tendrán que recaudar 350.000 dólares cada uno. El cuartel general de la campaña estará en Chicago y su personal estará compuesto por veteranos de la Casa Blanca.

Obama dejó en claro su mensaje el martes pasado, en una cena de recaudación de fondos -de 30.800 dólares el cubierto- en un popular restaurante de Nueva York.

"No podría hacer esto que hago si no supiera que hay allá afuera un montón de gente que me apoya y además muchos amigos que me respaldan", les dijo Obama a los donantes en la cena, que recaudó un millón y medio de dólares para el Comité Nacional Demócrata.

El factor Libia

Aunque ha recibido cierto impulso gracias a la economía en recuperación, los porcentajes de aprobación de Obama podrían caer con facilidad si la guerra de Libia no se resuelve rápidamente y los precios del combustible permanecen altos, o si los votantes lo culpan por el enorme déficit presupuestario de Estados Unidos. "La realidad de gobernar significa que ahora ya no puede ser todo para todo el mundo", dijo Meredith McGehee, del Centro Legal de Campañas, una organización sin fines de lucro con sede en Washington que se ocupa de las financiaciones de campaña y de temas éticos.

El año pasado, Obama criticó una decisión de la Corte Suprema que eliminaba los límites a los aportes de corporaciones y sindicatos a las campañas. Para los demócratas, esa decisión abrió las puertas para una inyección de dinero con intereses creados en la política.

Los expertos esperan que esa reglamentación beneficie más a los republicanos, dado el disgusto corporativo ante las leyes de Obama destinadas a reformar el sistema de salud y establecer un sistema de control más riguroso sobre los bancos. Pero los demócratas también se verán favorecidos. "Es poco realista pedirles a los candidatos que prescindan de ese dinero cuando, por definición, si uno hace lo que cree que debe hacer seguramente perderá", dijo McGehee.

Un eficaz esfuerzo de recaudación de fondos por parte de Obama podría ayudar al Partido Demócrata, que perdió en noviembre el control de la Cámara de Representantes y que tiene una mayoría más pequeña en el Senado.

Los donantes republicanos se concentrarán aún más en el Congreso si su partido no encuentra un candidato presidencial que tenga verdaderas posibilidades de derrotar a Obama, y algunos han admitido que será muy difícil negarle al mandatario un segundo período. El consejero político Karl Rove, que recaudó 120 millones para los candidatos republicanos, dijo que Obama debía ser considerado el candidato favorito.

Más recientemente, un operador republicano reflexionó sobre la falta de un candidato fuerte en su partido y dijo: "Obama podría ganar aunque solamente recaudara un dólar".

Traducción de Mirta Rosenberg