Venezuela: Las mentiras del poder popular
Las tesis de los chavistas sobre el poder popular y de lo que de ellas
se desprende: más participación y protagonismo, independencia, ejercicio
de la soberanía popular, democracia bolivariana, comunas, planificación
publica y popular, conciencia revolucionaria, poder constituyente,
pueblo legislador y otras tantas galimatías y pomposas denominaciones
sin sentido, solo tratan de disfrazar sin éxito, una sola y descarnada
forma de poder, la más primitiva y elemental de todas, la tiranía
comunista, por medio del líder y su partido.
Una tiranía comunista revestida de todo el poder del Estado, que ya, por
el simple hecho de existir, termina con toda pretensión de poder
popular, porque el verdadero poder popular solo es posible en la
ausencia del Estado.
El Estado es el poder organizado en un marco jurídico que es impuesto a
la sociedad, no importa si es capitalista o comunista, si el Estado
existe, su misma naturaleza le impedirá compartir soberanía y menos
todavía, si se trata de un poder autoritario y personalista, delegar
funciones.
El Estado es un súper organismo compuesto de órganos que actúan cada una
en su ámbito especial de poder, para ser parte del Estado hay que
obedecer y actuar dentro de su marco jurídico para tener eso que llaman
los planificadores, "organicidad", es decir, coherencia que no es otra
cosa sino la intención de preservar el poder entre quienes lo sustentan.
La democracia introdujo en el sistema del poder, la posibilidad de que
existiera la alternabilidad en el poder, es decir, por medio de
elecciones libres, secretas y universales el pueblo podía escoger las
personas y grupos organizados que se iban a encargar del Estado por un
período de tiempo determinado.
Pero es siempre el Estado el que soporta todo el peso de la organización
social, solo cuando éste se derrumba o desaparece es que otros formas
de poder tienen la oportunidad de aparecer y ser protagonistas, uno de
ellos era el poder popular, que nace simplemente del vacío de poder que
deja el Estado en caso de conmoción social, desastres, guerras, crisis
políticas, etcétera.
No es accidente que estas manifestaciones de poder popular se hayan dado
en los casos extremos de inundaciones y deslaves, cuando el gobierno
socialista chavista ha sido incapaz de proveer alivio a las penurias o
tener presencia efectiva en los sitios de desastre, las víctimas
abandonadas simplemente se organizan como pueden para sobrevivir.
Por ello es, que resulta sumamente sospechoso que en el gobierno
chavista, todos los ministerios se llamen del "Poder Popular" y que
exista un Ministerio del Poder Popular para las Comunas.
Este poder popular chavista carece de uno de los elementos más
singulares del verdadero poder popular que es la espontaneidad, las
verdaderas comunas nacen de un estado de necesidad para atender
principalmente problemas tales como abastecimiento de alimentos, la
seguridad y defensa del grupo, establecimiento de refugios y
campamentos, administración de justicia, etcétera.
Pero no es poder popular el que nace por decreto, ya envuelto en una
ideología, con un propósito político ya establecido y como instrumento
del Estado.
Los teóricos chavistas nos dicen que las comunas fueron suplantando a
los municipios en sus funciones, principalmente, porque no hacían su
trabajo, la verdad es que esa usurpación del poder político de los
municipios y sus alcaldías fue una línea política declarada y ejecutada
con toda la intención de darle protagonismo a las comunas.
Es bastante ingenuo por parte de la gente y las comunidades que
pertenecen a una comuna chavista, el pensar que ellos son autónomos e
independientes, que configuran la verdadera esencia del poder popular,
empezando porque tienen que preguntarse ¿de dónde salen los dineros que
los sustentan? Vienen del Estado.
¿Pueden hacer lo que quieran? No, tienen unas normas muy bien definidas
en la que ninguno de ellos participó en su elaboración, discusión o
promulgación, pero tienen que cumplirlas o… o si no, no serán
reconocidos por el Estado.
Para ser comunas tienen que registrarse ante un ente burocrático que se ocupa de ellos, y pertenece al Estado.
Ya existen incluso, manuales de planificación comunal que les indican lo
que deben hacer y cómo, todo está fríamente calculado por funcionarios
del Estado que lo que hacen es aprobar y financiar los proyectos.
Consejo comunal o comuna que se porten mal y se salgan de los parámetros impuestos por el Estado, no existen.
Entonces, ¿son poder popular? Lamento decirles que no, los están
engañando, de poder popular lo que tienen es el nombre, de restos son
dependientes del Estado comunista que los utiliza para crear la ilusión
de que se trata del pueblo ejerciendo su soberanía, pero en realidad es
un mal truco para cambiar las reglas electorales democráticas para
preservar al líder y la camarilla que se dice "revolucionaria" en el
poder.
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