El mundo tiene que prepararse para la derrota de Maduro

Milenio, México

Hace una semana, el régimen de Nicolás Maduro demostró una vez más el terror que le tiene a escuchar al pueblo de Venezuela. Mediante una carta de la Contraloría General se dio a conocer que, según ellos, estoy inhabilitada para ejercer cargos públicos durante 15 años, algo completamente falso y nulo.

La medida, además de ser ilegal e ilegítima, es una falta de respeto a todos los venezolanos. El régimen criminal de Maduro pretende, una vez más, aferrarse al poder a toda costa. Pero los ciudadanos y políticos hartos de vivir bajo una dictadura les tenemos noticias: el único que puede habilitar políticamente es el pueblo, y el pueblo elegirá de forma democrática a su liderazgo el 22 de octubre mediante elecciones primarias.

La Comisión Nacional de Primarias ya ha dejado en claro que desconoce la medida y así lo han hecho también varias de las grandes democracias del mundo: representantes de Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, Canadá, Francia, Ecuador, Colombia, Chile, Paraguay y Uruguay, junto con la Unión Europea, la ONU, la OEA y muchos otros actores que han dejado en claro su apoyo hacia la transición democrática en Venezuela. La inhabilitación no existe: es nula constitucionalmente y es nula para la mayoría que votará en octubre.

El diálogo para democratizar Venezuela comienza por el diálogo entre los demócratas,por comunicarse con quien gana en las urnas, y no con quien se aferra al poder a toda costa.Por eso, instamos a la comunidad internacional a defender la realización de las primarias en Venezuela y a respaldar sus resultados. Del gobierno de México esperamos una posición inequívoca alrededor de la voluntad expresada por los venezolanos en ese proceso. Una vez que el pueblo haya elegido a un representante para enfrentar a Maduro en 2024, la persona que resulte electa contará con la legitimidad necesaria para ejercer la interlocución oficial de los venezolanos ante cualquier país que desee reconocer y respaldar la voluntad democrática del pueblo de Venezuela.

Dentro de Venezuela lo tenemos claro: no será Maduro quien elija a quien lo enfrentará y derrotará en 2024.La inhabilitación es un obstáculo pequeño en comparación con todo lo que tenemos por delante, pero también si lo comparamos con todo lo que ya hemos dejado detrás. Esta elección es histórica: finalmente hemos logrado que una elección vuelva a ser por y para la gente, y que todos los venezolanos, incluyendo 3.5 millones de los 7 que se encuentran en el exilio, puedan votar. Si hemos logrado todo esto a pesar de este régimen, aún podemos lograr mucho más, y por ende el mundo debe prepararse para la inevitable derrota de Maduro.

Agradezco de todo corazón a los venezolanos, porque juntos hemos demostrado que la política nos pertenece a todos y que aquellos que todavía detentan todoel poder de las armas no pueden, sin embargo, frenar la voluntad popular de millones de venezolanos que sueñan con vivir en un país libre del cual puedan sentirse orgullosos.

El 2024 es la última oportunidad para muchos de poder quedarse en su país, o de reunirse con sus hijos y nietos que, tal como le sucede a la cuarta parte de la población venezolana, están hoy en el exilio como consecuencia de las acciones cometidas por este régimen criminal. Sabiendo todo lo que está en riesgo, le pedimos al mundo, y en especial a los demócratas mexicanos, que siga abogando y teniendo esperanza en Venezuela. Nosotros la tenemos y continuaremos luchando hasta el final.

@MariaCorinaYA