Pero siempre es bueno recordar que elegimos a esta gran nación porque hace siglos adoptó principios filosóficos, creo instituciones y tuvo una economía libre que permitió su crecimiento y pujanza.

Nuestros países no son pobres porque los EE.UU. son ricos. Son pobres porque hicimos todo lo necesario para destruir la creación de riqueza creyendo que los que ocupaban circunstancialmente nuestros distintos gobiernos solucionarían todos nuestros problemas inventando falsos derechos y distribuyendo lo poco que había.

La única forma de progresar es generando más y más riqueza, no repartiendo las migajas existentes.

Dado que si arruinamos a los Estados Unidos ya no habrá lugar hacia donde emigrar, pues aún no es posible la vida en marte, procuremos no repetir aquí los perversos hábitos y costumbres que devastaron los países que dejamos atrás.

Celebremos las enormes contribuciones que los hispanos hicimos a esta nación y amémosla y defendámosla como nuestro nuevo hogar.

¡Feliz Mes de la Herencia Hispana 2023!